sábado, 15 de noviembre de 2008

Unos cierran, a otros los cierran


Prisa ha anunciado el cierre de Localia. Al parecer el proyecto de televisiones locales del gigante polanquil arrastra unas pérdidas que lo hacen inviable. Lo siento por los curritos que andaran puteados por cuatro duros pero me alegro. En primer lugar, porque la calidad de la programación dejaba mucho que desear, así que tampoco lo vamos a echar de menos. Pero sobre todo porque se hace realidad aquello de que a cada cerdo le llega su San Martín.

Uno creció al arrullo de aquella Antena 3 que entre Prisa y quién se lo permitió se encargaron de cerrar y eso es algo que no he perdonado. El historial de cachondeo con la ley comenzó antes, con la concesión de la licencia de Canal Plus. Así que me parece justo que quien se ha pasado por la entrepierna la legalidad vigente vea ahora como el mercado (horror, he mentado la palabra tabú) le pone en su sitio.

Por otra parte, el panorama radiofónico anda revuelto estos días a raíz de las nuevas concesiones realizadas en Cataluña por el CAC, organismo de dudosa reputación sacado de la manga por los actuales gobernantes autonómicos. Como era de esperar, dan a unos (los más cercanos al poder) lo que les quitan a otros (los críticos) y ya tenemos el lío. En este tema tengo una opinión clarísima.

Se trata de la libertad del ciudadano para elegir y de la libertad de los profesionales o los grupos para opinar. Así pues, nada de limitar las concesiones. Si un grupo presenta un proyecto viable técnicamente, adelante. Ya se encargarán la audiencia y el mercado (mierda, he vuelto a decirlo) de poner a cada uno en su sitio. Así nos libramos de sufrir los caprichos del gobernante de turno y todo el mundo compite en igualdad de condiciones.

No hay comentarios: